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Radioterapia a bajas dosis: ¿Cómo ayuda a pacientes con fascitis o artrosis?

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La radioterapia es ampliamente conocida por su uso en el tratamiento de diferentes tipos de cáncer. Sin embargo, su aplicación no se limita solo a enfermedades oncológicas. En los últimos años, la radioterapia a bajas dosis se afianza como una opción terapéutica eficaz y segura para el tratamiento de patologías osteoarticulares benignas, como la artrosis, la tendinitis o la fascitis plantar. Es una técnica que, por su potente efecto antiinflamatorio, ofrece alivio y en ocasiones curación a pacientes que sufren dolor crónico y limitaciones funcionales o de movilidad.

¿Qué son las patologías osteoarticulares benignas?

Incluyen una gran variedad de dolencias que afectan a los huesos, tendones y articulaciones, pero que no son cancerosas. Entre las más comunes se encuentran la artrosis, artritis, tendinitis, fascitis plantar y bursitis. Estas patologías pueden provocar dolor crónico, inflamación y deterioro de la movilidad, afectando a la calidad de vida de los pacientes.

Radioterapia a bajas dosis: ¿Cómo funciona en estas patologías?

Lo primero que hay que aclarar es que la radioterapia aplicada al tratamiento de patologías osteoarticulares benignas funciona de forma totalmente diferente a la que se emplea en procesos oncológicos.

Cuando se trata de combatir un tumor maligno, la radioterapia se utiliza en dosis altas con el objetivo de actuar sobre el ADN (núcleo celular) entre otros y provocar la muerte de la célula tumoral.

En cambio, cuando se trata de enfermedades osteoarticulares benignas, la radioterapiase aplica a dosis muy bajas. Su principal mecanismo de acción es antiinflamatorio y analgésico, lo que ayuda a reducir la inflamación y el dolor en las áreas afectadas.

“La gran diferencia es la dosis administrada. La que se utiliza en los procesos como la fascitis plantar o la artrosis es hasta 80 veces inferior a la que se administra en procesos oncológicos”, explica el Dr. Jorge Pastor, jefe de Radioterapia de Ascires. “Con ello, aumentamos las moléculas antiinflamatorias y reducimos las pro-inflamatorias, con lo que logramos disminuir el dolor”, aclara el especialista.

¿En qué casos se emplea la radioterapia a bajas dosis?

La radioterapia a bajas dosis se emplea para tratar patologías benignas o inflamatorias en huesos, articulaciones y tendones. Estos son algunos ejemplos:

  • Artrosis: de rodilla, hombro, cadera y manos, principalmente.
  • Tendinitis y bursitis: aquilea, rotuliana, rotadores, epicondilitis (codo de tenista), epitrocleitis.
  • Pie: fascitis plantar, espolón calcáneo, Ledderhose.
  • Enfermedad de Dupuytren: afección que provoca la contracción de los dedos.

“Patología benigna puede ser un término confuso que utilizamos habitualmente dentro de la especialidad”, señala el Dr. Pastor. “Solo significa que no es maligna, lo cual no implica que no haya que tratarla y darle solución, ya que puede provocar un dolor significativo y limitar la calidad de vida del paciente”.

El dr. Jorge Pastor, jefe de Radioterapia de Ascires, en el acelerador lineal de Ascires Sagunto II.
El dr. Jorge Pastor, jefe de Radioterapia de Ascires, en el acelerador lineal de Ascires Sagunto II.

Perfil de pacientes: ¿Es para todos?

La selección de los pacientes candidatos a ser tratados con esta técnica es fundamental. Se pueden beneficiar de la radioterapia a baja dosis para patologías osteoarticulares benignas:

  • Pacientes con dolor crónico de más de tres meses de evolución.  
  • Pacientes que no responden a una primera línea de tratamiento estándar o convencional como el farmacológico, principalmente antiinflamatorios, fisioterapia o infiltraciones.
  • Pacientes que tienen contraindicado el uso de fármacos por enfermedades asociadas o que rechazan el tratamiento convencional.
  • Deportistas con lesión osteoarticular que no pueden tomar determinados fármacos por la normativa antidopaje. 

Beneficios de la radioterapia en patologías benignas

  • Pacientes con dolor crónico de más de tres meses de evolución.  
  • Pacientes que no responden a una primera línea de tratamiento estándar o convencional como el farmacológico, principalmente antiinflamatorios, fisioterapia o infiltraciones.
  • Pacientes que tienen contraindicado el uso de fármacos por enfermedades asociadas o que rechazan el tratamiento convencional.
  • Deportistas con lesión osteoarticular que no pueden tomar determinados fármacos por la normativa antidopaje. 

¿Cómo se aplica el tratamiento?

Estas son las características básicas del tratamiento de radioterapia a bajas dosis para patologías benignas:

  • Se administra habitualmente en 6 sesiones a días alternos.
  • Cada sesión tiene una duración aproximada de 15 minutos.
  • El efecto no es inmediato, si no que se produce generalmente a lo largo del primer mes tras finalizar el tratamiento.
  • En patologías provocadas por malos hábitos (como fascitis derivadas de llevar un calzado inadecuado), es fundamental corregirlos para evitar que la dolencia se repita.

¿Es una técnica nueva?

A pesar de que el interés por el uso de la radioterapia a bajas dosis para enfermedades de huesos, articulaciones y tendones ha aumentado en los últimos años, no se trata de una técnica nueva, sino que tiene un recorrido de más de un siglo.

En 1898 se publicó el primer artículo científico sobre el uso de la radioterapia para abordar la artritis en 4 pacientes que tuvieron una respuesta completa en el dolor.  

Alemania es uno de los países donde mayor desarrollo ha tenido, con un impulso importante en las últimas tres décadas: “El 30% de los tratamientos de radioterapia que se llevan a cabo en este país son en pacientes con patología osteoarticular benigna”, destaca el jefe de Radioterapia de Ascires. En España esta técnica se aplica en pacientes con dolor crónico desde hace unos 15 años, pero su implantación en el país es todavía irregular. El desconocimiento de sus ventajas, tanto por parte de la población como por los propios profesionales que se dedican al tratamiento del dolor, es una de las razones que explican que no se haya extendido de forma más generalizada.

Equipo de radioterapia de Ascires Sagunto II.

Ascires, pionera en técnicas avanzadas de Radioterapia

La radioterapia para patologías osteoarticulares benignas supone una opción terapéutica altamente efectiva para los pacientes que buscan alivio del dolor y mejora funcional sin recurrir a procedimientos invasivos. Como siempre, es fundamental consultar con un especialista para determinar si este tratamiento es adecuado para tu situación específica.

En Ascires, contamos con un equipo de Radioterapia con más de 25 años de experiencia, pionero en España en realizar radioterapia con intensidad modulada (IMRT) y radioterapia guiada por superficie (SGRT). En nuestra clínica Ascires Sagunto II, aplicamos esta técnica para pacientes con patología osteoarticular benigna. Si necesitas más información, no dudes en contactar con nuestro Centro de Atención al Paciente.

Ascires

Ascires es el grupo biomédico pionero en España en Diagnóstico por Imagen, Medicina Nuclear, Genética Médica y Oncología Radioterápica guiada por Imagen. Desarrolla su actividad para hospitales públicos y privados, así como en su propia red de Clínicas Biomédicas en la Comunidad Valenciana y Cataluña. Con una trayectoria de más de 50 años y un equipo de más de 600 profesionales, el grupo Ascires centra su labor en diagnóstico y tratamiento, reinvirtiendo anualmente una media del 15% de los beneficios en I+D+i. Una reinversión que le permite la constante incorporación de lo último en tecnología y software médico.

En este sentido, Ascires Grupo Biomédico está focalizado en medicina personalizada de precisión, gracias a la continua innovación en el desarrollo de biomarcadores de inteligencia artificial y algoritmos de diagnóstico propios, que integran los datos genómicos, clínicos y los procedentes del Diagnóstico por Imagen.

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