Vivir con dolor crónico puede ser una experiencia abrumadora que afecta no solo a la esfera física, sino también a la mente, las emociones y puede mermar notablemente la calidad de vida de las personas que lo sufren. Pero el dolor crónico no tiene por qué ser una condena. Con un enfoque adecuado y realista, es posible manejarlo y mejorar en ocasiones significativamente la calidad de vida.
En la Unidad de Tratamiento del Dolor de Clínicas Ascires, creemos que el primer paso para tratar el dolor crónico es comprenderlo, por eso, en este artículo, vamos a intentar dar algunas de las claves para un abordaje realista del dolor y de esta manera mejorar tu día a día.
¿Qué es el dolor crónico?
Entendemos por dolor crónico aquel que persiste durante más de tres meses, incluso después de que la lesión que lo originó se haya resuelto. Puede presentarse de diferentes formas y, en ocasiones, puede no tener una causa identificable. Se estima que el dolor crónico afecta a más del 20% de la población mundial y puede surgir de condiciones como:
- Dolores de espalda (lumbalgias, cervicalgias,…etc)
- Fibromialgia.
- Neuralgia o dolores neuropáticos (p.ej. ciatalgias, neuralgias postherpéticas, neuralgias del trigémino,…etc)
- Enfermedades degenerativas como la artrosis (rodilla, cadera, hombro, …etc)
- Artritis o enfermedades reumáticas.
- Migrañas persistentes.
Según el Dr. Fabregat, responsable de la Unidad de Tratamiento del Dolor Ascires, “el dolor crónico no es solo una señal de advertencia, sino una enfermedad en sí misma que puede convertirse en un obstáculo para una vida plena si no se aborda adecuadamente”.
Las claves para un abordaje realista del dolor crónico
En Clínicas Ascires, abordamos el dolor crónico desde una perspectiva integral y siempre realista, considerando que no siempre es posible curarlo o eliminarlo por completo, pero sí plantear estrategias que permitan controlarlo para mejorar la calidad de vida. Algunas de las claves de nuestro enfoque son:
1. Entender que cada caso es único
El dolor crónico no afecta a todas las personas de la misma manera. Por eso, es esencial realizar una historia clínica enfocada en el dolor con una evaluación exhaustiva, así como la realización de exploraciones complementarias avanzadas que permitan identificar las posibles causas subyacentes y personalizar el tratamiento. Para ello nos servimos de un equipo multidisciplinar que trabajan juntos para diseñar un plan adaptado a tus necesidades.
2. Combinar tratamientos médicos y terapias complementarias
El tratamiento del dolor crónico combina enfoques médicos y terapias complementarias. “No nos limitamos a recetar fármacos, sino que utilizamos tratamientos intervencionistas avanzados y ofrecemos apoyo psicológico, terapia física y rehabilitación”, señala el especialista.
Entre los tratamientos intervencionistas con los que contamos se encuentran:
- Radiofrecuencia: Ideal para dolores articulares o de la columna vertebral, interrumpe las señales de dolor.
- Bloqueos nerviosos e infiltraciones musculoesqueléticas: Alivian el dolor localizado y reducen la inflamación.
- Medicina regenerativa: Como el PRP, para estimular la curación natural del cuerpo.
- Técnicas de neuromodulación: Como la estimulación transcraneal o la estimulación medular, las cuales, de manera más o menos invasiva permiten modular la sensación dolorosa mejorando el impacto del dolor en la vida diaria.
3. Adoptar un enfoque biopsicosocial
El dolor no es solo físico. En muchos casos, está influenciado por factores emocionales, psicológicos y sociales. Por eso, en nuestra unidad integramos:
- Apoyo psicológico para ayudarte a manejar el estrés, la ansiedad y la depresión asociados al dolor crónico.
- Terapias cognitivo-conductuales para modificar pensamientos y comportamientos relacionados con el dolor.
- Educación sobre el dolor, para empoderarte en el manejo de tu condición.
4. Establecer expectativas realistas
Es, tal vez, uno de los aspectos más importantes. Entender que el objetivo principal del tratamiento no siempre es curar o eliminar el dolor por completo, sino reducirlo a un nivel tolerable que nos permita aumentar nuestras actividades de la vida diaria y por tanto mejorar la calidad de vida.
El papel del paciente en el tratamiento
El manejo del dolor crónico es un trabajo en equipo, y el paciente juega un papel crucial. Se obtienen mejores resultados en aquellos pacientes que se implican activamente en el plan de tratamiento. Algunas de las estrategias que pueden ayudarte a potenciar los resultados incluyen:
- Mantener una comunicación abierta con tu médico.
- Seguir los tratamientos y terapias recomendadas.
- Adoptar un estilo de vida saludable, que incluya una dieta equilibrada, actividad física adaptada y técnicas de relajación.
¿Por qué elegir la Clínica Ascires para tratar el dolor crónico?
En nuestra Unidad de Tratamiento del Dolor, contamos con un equipo multidisciplinar experto y con las tecnologías más avanzadas para abordar el dolor crónico desde todos los ángulos. Nuestro enfoque personalizado garantiza que recibirás el tratamiento más adecuado para tus necesidades, siempre con el objetivo de mejorar tu calidad de vida.
Da el primer paso hacia una vida mejor
Si sufres de dolor crónico y quieres explorar un abordaje realista que realmente funcione, no dudes en contactarnos. En Clínicas Ascires Campanar (Valencia) y Gandía estamos aquí para acompañarte en cada paso del camino hacia una vida con menos dolor y más bienestar.